Asesinato de Feriante en Plaza Homero Manzi en Rosario Genera Inquietud sobre la Seguridad en Ferias Populares

En el municipio de Rosario, la comunidad está profundamente preocupada por el asesinato de Rosa Romero, una feriante de 67 años que fue asesinada de un disparo en la cabeza el sábado a las 16 horas frente a cientos de personas en la Plaza Homero Manzi. Aunque se cree que el motivo del asesinato está relacionado con una situación externa a la feria, este incidente extraordinario ha intensificado la atención sobre la seguridad en las ferias populares, en particular, la ubicada entre las calles Salvá, Rui Barboza, avenida Bermúdez y Lainez, en la zona sur de Rosario.

La Plaza Homero Manzi, conocida como la “Saladita del Sur”, alberga a alrededor de 1.300 personas que venden sus productos todos los sábados y domingos. De estos, aproximadamente 1.000 son feriantes regulares, mientras que unos 300 participan de forma intermitente. La feria, que comenzó a funcionar hace dos décadas, ha experimentado un crecimiento exponencial y se ha vuelto más transitable en comparación con el pasado.

Pablo Nasi Murúa, subsecretario de Economía Social municipal, comentó: “Hemos hablado con la comisión de feriantes, y no se han registrado amenazas dentro de la feria en todo este proceso. El incidente fue muy particular; dos individuos ingresaron, buscaron a la persona, le dispararon y se marcharon, siguiendo una dinámica similar a otros hechos policiales en la ciudad. La mujer solía asistir, y las personas que estaban presentes expresan su sorpresa. No había indicios de que algo así pudiera suceder, y no hubo denuncias ni extorsiones”.

Se había reforzado la seguridad en la plaza, con una patrulla policial regular acordada con los feriantes durante el último año. Sin embargo, en el momento del disparo, no queda claro dónde estaban los oficiales.

Dentro de la comunidad de emprendedores en la Plaza Homero Manzi, el 70% asiste de manera regular y depende de sus ventas, mientras que el 30% lo hace de manera intermitente debido a la falta de productos para vender o la incapacidad de mantener una presencia constante. Esta fluctuación en la participación de feriantes a veces puede causar conflictos, ya que un fin de semana puede ser tranquilo y otro puede haber un aumento repentino de personas no contempladas inicialmente.

Las ferias populares son sensibles al contexto económico del país, y la situación económica actual ha llevado a muchas personas a buscar oportunidades para ganar dinero extra. Estos lugares tienden a crecer en tiempos de dificultades económicas y disminuir cuando la población tiene empleo estable.

Para abordar estas cuestiones, los equipos municipales trabajan en colaboración con las comisiones feriales y los delegados de los feriantes para encontrar soluciones y encauzar el crecimiento de las ferias de manera adecuada. Sin embargo, el proceso lleva tiempo, y la implementación de una ordenanza que regule las ferias populares, aunque reciente, se está promoviendo gradualmente.

Las tensiones también surgen con los vecinos, ya que algunos feriantes buscaban habilitar una jornada adicional por semana. Se les explicó que esto no garantizaría un aumento en las ventas y que primero deben abordar y mejorar los dos días existentes. La comunicación y el diálogo son esenciales para evitar conflictos y encontrar soluciones viables.

El subsecretario reconoció que no es una tarea fácil llegar a estas comunidades, pero mediante el diálogo, se pueden abordar situaciones difíciles. El Estado municipal tiene recursos limitados, y se requiere coordinación con las autoridades provinciales y nacionales para abordar cuestiones alimentarias y sociales. La comunidad se encuentra en una situación de precariedad económica, y el municipio trabaja incansablemente para escuchar y ayudar a encontrar soluciones para sus desafíos diarios.

Tras el trágico incidente, se decidió suspender la feria del domingo para preservar el lugar en memoria de la víctima. La próxima semana, se llevará a cabo una reunión para discutir el futuro de la Saladita del Sur, teniendo en cuenta las preocupaciones de los feriantes y la necesidad de mantener un ambiente seguro y viable.