Ataque Sin Precedentes de Hamas en el Sur de Israel Desencadena Alerta de Guerra
En un acontecimiento sin precedentes, milicias islámicas de Hamas, desde la Franja de Gaza, llevaron a cabo un ataque en el sur de Israel durante la madrugada. Se estima que alrededor de 50 milicianos lograron infiltrarse en Israel, ingresando incluso a bordo de sus propias camionetas. Por primera vez, milicianos palestinos penetraron sin ser detenidos en el sur de Israel, atacando localidades como Sderot y varias comunidades de kibutz. Simultáneamente, cientos de cohetes fueron lanzados desde Gaza hacia ciudades israelíes, incluyendo Jerusalén. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) declararon una «alerta de guerra» en todo el país.
El ataque de Hamas en Gaza comenzó con una intensa ráfaga de cohetes disparados contra el sur y el centro de Israel, incluyendo Tel Aviv y otras áreas metropolitanas, seguido de la ruptura de la frontera de Gaza en múltiples lugares y la infiltración en comunidades israelíes en el sur. Durante el ataque, al menos un puesto de guardia israelí fue capturado y se informa que al menos un soldado fue secuestrado. Los milicianos palestinos fueron vistos regresando a Gaza en vehículos similares a los jeeps del ejército israelí.
Videos compartidos por residentes del sur de Israel mostraron a milicianos palestinos patrullando las calles sin enfrentar oposición visible, lo que sugiere que estaban llevando a cabo una especie de «cacería humana» en busca de civiles israelíes. Esta táctica es común entre los milicianos palestinos que logran infiltrarse en Israel, y tanto el Estado de Israel como los medios locales los describen como «terroristas» en lugar de simplemente milicianos o guerrilleros.
Los ataques causaron daños significativos en hogares y propiedades en ciudades y pueblos israelíes, con niveles de destrucción no vistos desde la Segunda Guerra del Líbano en 2006. A medida que la situación se desarrollaba, las sirenas de alerta sonaron en toda la región, incluyendo Beer Sheva, Ashdod, Rishon Lezion y las comunidades del desierto del Néguev, y más tarde también en Tel Aviv y Jerusalén.
El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, convocó a una consulta urgente con los servicios de seguridad en el cuartel general militar de Tel Aviv, ya que el sistema de defensa israelí fue sorprendido por completo por el ataque de Hamas, que logró una victoria inicial significativa.
El líder del ala militar de Hamas, Mohammed Deif, atribuyó la responsabilidad del ataque a Israel y su «profanación de Al-Aqsa», refiriéndose al complejo de templos en el corazón de Jerusalén. Deif anunció una operación militar llamada «Tormenta de Al-Aqsa» como respuesta al supuesto ataque israelí al movimiento islámico y al sagrado sitio. El conflicto sigue en desarrollo, y se teme que el número de bajas civiles israelíes pueda aumentar.
