Cómo es la nueva tecnología que llega a Rosario y logra un efecto lifting sin cirugía
El negocio de la estética crece a nivel global con nuevas tendencias para las cuales se desarrolla tecnología con resultados cada vez más eficaces. Quienes conocen este sector, saben que participar en el exterior de los congresos mundiales es clave para estar a la vanguardia de la medicina estética. En esa línea, quienes lideran la clínica rosarina Dhermavita viajaron hace dos meses al evento más importante del sector en Mónaco donde se presentó un nuevo equipo, llamado Emface, que promete un lifting natural sin agujas, sin cirugías, sin dolor. Esa tecnología es la misma que usan los médicos especializados en estética más reconocidos en las grandes urbes mundiales como París, Roma o Nueva York y, desde hace sólo un mes, ya está disponible para los rosarinos porque fue importada por Dhermavita.
La nueva tecnología promete ser un boom en la ciudad ya que da una respuesta muy buscada en la demanda de mujeres y hombres. Un dato interesante es que en este primer mes que estuvo en uso un 50% de los pacientes fueron hombres. ¿Por qué? Ocurre que ese género muchas veces elige no utilizar inyectables, como la toxina botulínica o el ácido hialurónico, y prefiere utilizar tecnología no invasiva con cambios moderados. Este equipo lo que permite “es un reposicionamiento de los tejidos blandos, músculo piel y grasa, pero como hay un efecto bioregenerativo sobre el músculo que se inserta en el hueso hay además aumento de calcificación ósea lo que mejora mucho el óvalo facial”, explica con lenguaje médico la doctora María Sol Torres Va, directora de Dhermavita. En concreto, lo que hace el equipo es reclutar todas las fibras musculares y a través de pequeñas contracciones, que no son posibles de forma natural, le da tono a los músculos de la cara. Para decirlo de forma muy coloquial, trabaja de modo similar a cualquier músculo del cuerpo en un gimnasio. Al sumar tono, se levanta.
Cierto es que desde que comenzó a especializarse en estética la doctora Torres Va buscó innovar con la tecnología que fue adquiriendo. La clínica fue fundada en 2013 y hoy su socio y director comercial es Ignacio Uribe, ingeniero industrial, con quien aseguran hacen un gran equipo. No sólo son socios sino que además comparten su vida personal junto a sus dos hijos. Cada uno tiene su rol, María Sol aporta todo su saber profesional, incluso es speaker internacional en diferentes congresos de temas vinculados a la tecnología en estética, e Ignacio, como buen ingeniero, se dedica a la compra, evaluación y análisis de los equipos. Explica Ignacio en esta entrevista con Negocios que: “nosotros nos complementamos mucho yo me ocupo de los equipos, funcionamiento, elijo qué equipo comprar, sé que comprar, hablo con los fabricantes, estudio el equipo y hago todo un análisis de qué traer y por qué lo vamos a comprar, rentabilidad, costo fijo, variable y reposición”. Una vez que la tecnología está en la clínica, es el equipo médico el que le toca dar el diagnóstico y elegir el tratamiento adecuado con la aparatología que cada paciente necesita.
El nuevo equipo Emface en pleno funcionamiento en la clínica con sede en Brown 2063.
Hay equipo
En Dhermavita trabajan dos dermatólogas, dos médicos especializados en estética y cirugía plástica y seis kinesiólogos. Y son estos últimos quienes operan los equipos sobre los pacientes, es por eso que es fundamental que estén formados y certificados. En total cuentan con quince equipos para distintos tratamientos de medicina estética que incluyen tecnología tanto para tratamientos faciales como corporales.
En lo que respecta a los costos, cada caso es particular porque en la clínica establecen un protocolo basado en la experiencia personal y en la validación científica que establece qué equipo se utilizará y con cuál se puede combinar. Pero puntualmente en el caso del nuevo equipo que acaba de llegar, Emface, el tratamiento de seis sesiones tiene un costo de u$s1500, tomando el dólar oficial y luego es importante sumar dos sesiones de mantenimiento ese mismo año. Lo que aclara la doctora es que “el resultado es progresivo y permanente, con una durabilidad de hasta un año. A partir de allí, se puede repetir el proceso”.
El Emface es una tecnología de la firma checa británica BTL avalada por nueve estudios clínicos que aseveran una reducción del 37% en arrugas de la piel, un 30% más de tono muscular, un efecto lifting del 23% con una satisfacción del 91% en pacientes. Se realiza durante 20 minutos y es un masaje agradable sobre la piel donde se aplican los parches que producen las mejoras en la frente, cejas, mejillas y línea mandibular.
Invertir para crecer
La puesta en marcha de esta última tecnología Emface llega a Dhermavita tras muchos años de formación y crecimiento de la empresa. Si vamos al inicio, luego de recibirse de médica, los primeros pasos en estética de María Sol fueron con dos cirujanos rosarinos: “durante tres años trabajé en una concurrencia con los doctores Soraides y Arredondo, cirujanos plásticos, en una clínica que funcionaba en boulevard Oroño y Santa Fe. Fueron tres años ayudando en el quirófano, realmente me gustaba mucho”, recuerda. Allí descubrió que su camino dentro de la medicina sería la estética, pero decidió que en aquel momento era más amigable para una mujer ingresar a este campo a través de la dermatología, por lo cual hizo primero clínica médica en el Sanatorio Parque y luego la residencia en Dermatología.
La doctora María Sol Torres Va, directora de Dhermavita.
En el caso de Ignacio, trabajó en distintas empresas e industrias de Rosario hasta que decidió ocupar el 100% de su tiempo en el crecimiento de Dhermavita. “Fuimos creciendo paso a paso e incorporando cada vez más equipamiento, hasta llegar a los quince equipos que tenemos hoy”, detalla. María Sol agrega que siempre le gustó el trabajo con aparatología porque “hay toda una movida a lo natural y los tratamientos con esos equipos tienen ese efecto”. Recuerda que el primer aparato para estética que compraron fue una luz pulsada israelí, que era un boom allá por el 2010 y define: “siempre nos caracterizamos por comprar equipos premium y que den resultado, yo necesito ver que hay un cambio”. En este sentido, Ignacio agrega una frase clara: “parece una obviedad, pero no lo es, nosotros compramos equipos que hacen lo que dicen que hacen. Porque hay muchos que prometen cosas que luego no lo logran”.
El equipo que promete un efecto lifting natural.
Al cierre de la entrevista de Negocios, una de las pacientes de la clínica, Sonia Bauducco, quiso contar su experiencia con el equipo Emface. “Me gustó porque es una tecnología nueva que tiene muchos beneficios y se ven rápidamente. Voy por la tercera sesión, es decir, la mitad del tratamiento y ya veo resultados. Y lo bueno es que no te estás inyectando ningún producto, es totalmente inocuo”.