Concejal Federico Lifschitz Reactiva Debate Sobre Cuidacoches en Rosario
En Francia y Güemes, un cartel del concejal socialista Federico Lifschitz ha reavivado el debate sobre la actividad informal de los cuidacoches en Rosario. El mensaje, directo y provocador, dice: “Todos sabemos que los trapitos te cuidan el auto de ellos mismos. No al sindicato de trapitos en Rosario. Basta de boludeces».
Lifschitz explicó que el cartel es un canal de comunicación para visibilizar los temas de la ciudad y establecer un vínculo con aquellos interesados. «Quiero ponerlo a disposición de todos los rosarinos que lo crean importante», expresó el edil.
La polémica surge en un contexto de denuncias sobre extorsiones por parte de los trapitos y el debate sobre la posible creación de un sindicato de cuidacoches en Rosario. Varias ciudades de la provincia han prohibido esta actividad. Lifschitz presentó un proyecto para terminar con la práctica informal, pero aún no ha sido tratado en el Concejo.
«Ingresé en el Concejo un proyecto para terminar con la práctica informal de manera progresiva, comenzando con los lugares de estacionamiento medido, eventos culturales masivos y algunas instituciones públicas», explicó Lifschitz a La Capital. El objetivo es discernir entre quienes han cometido delitos y quienes no, ofreciendo a estos últimos alternativas formales de trabajo.
Hace un mes, Santa Fe prohibió a los cuidacoches, seguida por San Lorenzo. Lifschitz criticó a los concejales que no han tratado el tema en Rosario, señalando tres posturas: quienes quieren avanzar hacia una solución, quienes apoyan la sindicalización de los trapitos y quienes prefieren no actuar.
«Nuestra iniciativa contempla la mirada social de quienes trabajan honestamente, pero también la de aquellos afectados por intimidaciones», afirmó el edil. «No hay que romantizar esta práctica informal», añadió, pidiendo combatir a quienes lucran con el espacio público.
Desde que Santa Fe aprobó la prohibición, el municipio ha recibido 256 denuncias, con un 95% de los trapitos desistiendo de su accionar tras ser denunciados. Lifschitz asegura que, de aprobarse una ordenanza similar en Rosario, habrá una «política de control efectiva» en coordinación con la policía de Santa Fe.
La central de denuncias 911 ha recibido 1.510 llamadas relacionadas con cuidacoches y limpiavidrios en casi cinco meses. Las denuncias incluyen amenazas, extorsión y agresiones, entre otras. Lifschitz destacó un «vacío jurídico» que están tratando con legisladores provinciales para proporcionar a la justicia mayores herramientas en caso de aprobarse la ordenanza.