Newell’s y Central entregaron un clásico vibrante y fue justo empate: 1 a 1
Damián Martínez abrió la cuenta en el clásico de cabeza a los 52′. Pero enseguida Newell’s reaccionó y lo empató Nicolás Castro a los 59′. El clásico fue emotivo y terminó en reparto
Palo y palo, de ida y vuelta, con ganas, algunos destellos de fútbol. Así transcurrió este 1-1 entre Newell’s y Central que tuvo emociones varias y al que no le faltó intensidad, sobre todo en ese primer tiempo en el que las situaciones aparecían una tras otra, pero a las que les faltó fineza en la definición. Y después, un segundo tiempo con menos juego, con más temores y también algunas intenciones, pero que tuvo lo más importante: los goles. Newell’s no pudo volver a ganar un clásico y Central logró romper la racha de derrotas seguidas y como esas se podrán buscar decenas de connotaciones, pero lo que quedaron de los 90 minutos en el Coloso es que los dos fueron a buscarlo, que quisieron lastimarse y que terminaron abrazados de un empate justo.
Infernal fue el ritmo que los equipos le metieron desde el primer minuto. Porque así lo pensaron y así lo llevaron a la práctica. Central pisó más rápido el acelerador y tuvo una de las más claras del primer tiempo. Tapón de Aguerre de manera formidable. Pero a Newell’s le llevó muy pocos minutos acomodarse y no sólo eso, sino empezar a inquietar. Lo hizo con la movilidad de Comba por derecha, con el soporte de Pablo Pérez y actitud de Cristaldo. El Churry tuvo dos seguidas, la primera que terminó con la intervención de Broun y la otra con una media vuelta que se fue cerca del palo derecho. Newell’s usufructuaba los errores en la salida del canalla, como en ese pase de Fatura Broun a Avila, que terminó en el lateral. Saque rápido y otra acción de riesgo, en los pies de Cristaldo.PUBLICIDAD
En Central, Vecchio andaba en una pierna y eso el canalla lo sintió. Por eso la búsqueda tenía que ser para Gamba directamente. Todo bajo un ritmo frenético, en el que Central volvió a meterse en partido. Y a generar. Allí empezaron a ser clave las trepadas de Martínez, que casi siempre terminaban con la pelota dentro del área. En una Ruben no llegó a conectar y en otra su remate (tras pase de Vecchio), dio la cara externa de la red. En esos minutos fue cuando el palo y palo no decaía, y cuando comenzaba a agigantarse la figura de Aguerre, que tuvo que esforzarse con ese remate de afuera del Pupi Ferreyra.
El canalla siguió siendo un poco más y por eso tuvo la chance de ponerse en ventaja. Gamba metió un centro furibundo desde la derecha que Ruben no alcanzó a conectar y en la continuidad de la jugada el Pupi Ferreyra le prendió cartucho y la pelota lamió el palo derecho del arco leproso.
Todas esas emociones merecían que hubiera habido un gol, pero la mala puntería de los encargados de definir hicieron que la marcha a los vestuarios fuera de 0 a 0.
¿En el complemento iban a arriesgar como en el primero? Sí. Los dos se animaron, con la salvedad de que Central mostró un olfato más goleador, al menos fue el primero en demostrarlo. Porque no sólo insinuó, sino que lo llevó a la práctica. En ese córner de Vecchio que terminó con la peinada de Martínez para sorpresa de Aguerre. No sólo quebró el cero, sino que pareció un impacto fuerte para un Newell’s que acusó el golpe. Porque empezó a errar pases fáciles, a tener dificultades para cruzar la mitad de la cancha, exponiéndose al juego de un Central que tuvo en esos cinco minutos el tiempo justo para ir por otro mazazo.PUBLICIDAD
Claro, Newell’s no le dio tanto tiempo tampoco, porque en una jugada que nació de un lateral, Comba, sin dudas el mejor de la lepra, se filtró entre una doble marca para asistir a Pérez y este a Nico Castro, que con el arco de frente le metió un fierrazo, que se desvió en Almada y burló la resistencia de Broun.
De ahí en más fue otro partido, el de la cabeza, el resto físico, de los cuidados y, porqué no, los temores. Por eso los dos comenzaron a cuidarse más de la cuenta, pero con un Newell’s un poco más atrevido, yendo por el lado de Comba.
De aquellas jugadas a granel del primer tiempo se pasó a las esporádicas del segundo, con goles incluidos, pero con una intensidad que fue mermando con el correr de los minutos. Un cabezazo de Avila tras un córner y otro (la pelota lo sorprendió) de Scocco. No hubo más que eso frente a los arcos.
Y con el cansancio lógico la persiana se fue bajando para un partido de una emotividad impropia de un clásico, pero que por la propuesta de ambos y la generación de peligro que hubo en ambos arcos pareció ser justo.
Síntesis
1 Newell’s: Alan Aguerre 6; Gabriel Compagnucci 6, Cristian Lema A 5,5, Facundo Mansilla 5,5 y Franco Negri 5,5; Pablo Pérez A 5,5 (63′ Fernando Belluschi 5), Juan Sforza A 4,5 (63′ Mateo Maccari 6) y Nicolás Castro 6,5; Maximiliano Comba 7 (92′ Juan Giani –), Ignacio Scocco 6 y Jonatan Cristaldo 5,5 (27′ Ramiro Sordo 5,5).
DT: Fernando Gamboa.
1 Central: Jorge Broun 5,5; DAMIAN MARTINEZ A 7(67′ Fernando Torrent 5), Facundo Almada A 6, Gastón Ávila 5,5 y Lautaro Blanco 5; Diego Zabala 5,5, Emmanuel Ojeda A 5,5(78′ Julio Luques 5), Emiliano Vecchio A 5 y Luciano Ferreyra 4,5; Lucas Gamba 6,5 (78′ Alan Marinelli 5), y Marco Ruben 5.
DT: Cristian González.
Goles: 52′ Martínez (C) y 59′ Castro (N).
Árbitro: Andrés Merlos 5.
Estadio: Coloso Marcelo Bielsa.
A Amonestado.
E Expulsado.
La figura.