Investigación contra la PAT: Detenidos ocho policías por el robo de cocaína y dinero en operativo ilegal
El robo de 15 kilos de cocaína y 50 mil dólares durante un operativo irregular en agosto pasado ha provocado la detención de ocho agentes de la Policía de Acción Táctica (PAT). Este escándalo, que involucra a una decena de funcionarios, desató una investigación que está poniendo bajo la lupa el accionar de la fuerza policial en Rosario.
El operativo bajo sospecha
El hecho ocurrió el 13 de agosto en una vivienda ubicada en la zona oeste de Rosario. Los agentes de la PAT llevaron a cabo lo que describieron como un procedimiento de rutina, en el que reportaron haber secuestrado medio kilo de cocaína, una balanza, dos armas de fuego y tres granadas. Según el informe oficial, el operativo se inició tras observar a dos personas que, al advertir la presencia policial, ingresaron a la vivienda, lo que supuestamente motivó la intervención.
Sin embargo, las evidencias recolectadas y las denuncias de los imputados comenzaron a contradecir la versión policial. El relato presentado por los agentes fue puesto en duda por la defensa de los acusados, quienes aseguraron que la operación tenía irregularidades. Esta situación llevó a que la causa, en principio gestionada por la justicia provincial, pasara a la órbita federal, complicando la situación de los policías involucrados.
Policías detenidos y allanamientos
El cambio de dirección en la investigación permitió descubrir el verdadero trasfondo del operativo. Los fiscales Javier Arzubi Calvo, Soledad García, Andrés Montefeltro y María Virginia Sosa determinaron que los agentes de la PAT habían estado vigilando la vivienda durante dos horas en patrulleros antes de que una persona llegara al lugar, momento que aprovecharon para realizar un allanamiento ilegal. Durante esa intervención, los policías se apropiaron de al menos 15 kilos de cocaína, 50 mil dólares y alrededor de veinte armas de fuego.
Ante la contundencia de las pruebas, el juez federal Carlos Vera Barros autorizó allanamientos en la sede de la PAT, ubicada en Lola Mora al 100 bis, y en varias localidades de la provincia de Santa Fe, como Puerto San Martín, Vera, Tostado, Reconquista y la capital provincial.
Si bien hasta el momento no ha trascendido la identidad de los agentes detenidos, se sabe que hay dos jefes policiales entre los implicados, lo que refuerza la sospecha de que las irregularidades podrían estar respaldadas por un entramado de corrupción dentro de la fuerza. La audiencia de formalización de la investigación está prevista para la semana próxima, y se espera que en ella se conozcan más detalles sobre la participación de los funcionarios en este caso.
Un caso que sacude a la policía y la justicia
El escándalo no sólo afecta a la imagen de la PAT, sino también a la relación de confianza entre la ciudadanía y las fuerzas de seguridad. El operativo irregular, más allá de la apropiación de la droga y el dinero, representa una fractura en el sistema de justicia, que ahora deberá investigar a fondo la posible existencia de otros hechos de corrupción dentro de la policía.
El allanamiento y la detención de ocho de los diez policías involucrados se produce en un contexto de creciente tensión en Rosario, una ciudad que enfrenta desafíos en materia de seguridad pública. El narcotráfico y la violencia siguen siendo dos de los principales problemas de la región, y este caso pone de manifiesto la gravedad de la situación. La actuación de los agentes de la PAT, en lugar de combatir el crimen, parece haber aprovechado su posición para beneficiarse ilícitamente, afectando tanto a la lucha contra el narcotráfico como a la percepción de la seguridad ciudadana.
Este caso se suma a otros escándalos que han involucrado a las fuerzas policiales en los últimos tiempos, lo que refuerza la necesidad de reformas profundas y de una mayor supervisión sobre las actuaciones de las distintas unidades de seguridad.
La próxima audiencia
La audiencia de formalización de la investigación marcará un punto clave en el desarrollo de este caso. Los fiscales buscan avanzar con pruebas sólidas que no solo confirmen el robo de la cocaína y el dinero, sino también la existencia de un esquema más amplio de corrupción dentro de la PAT. Mientras tanto, la sociedad rosarina espera respuestas claras y una actuación contundente por parte de la justicia para que hechos como este no queden impunes.
Implicancias a largo plazo
La investigación y las detenciones tienen el potencial de ser un punto de inflexión en la historia reciente de la seguridad en Rosario. Si bien la ciudad ha estado en el centro de la lucha contra el narcotráfico, este tipo de episodios evidencian que los problemas no solo se encuentran en las calles, sino también dentro de las instituciones que deben velar por el cumplimiento de la ley. La corrupción policial es un tema recurrente en muchas regiones de Argentina, y este caso refuerza la necesidad de mantener controles estrictos y de reformar las estructuras de seguridad.
La detención de los policías implicados no solo es una señal de que la justicia puede actuar, sino también un recordatorio de que el sistema de seguridad requiere una vigilancia constante para evitar que quienes deben proteger a la población terminen siendo parte del problema.
