Cruci y su proyección internacional: un gigante del juego que apuesta al futuro
“El abanico es infernal”. Con estas palabras, Ignacio Imaz, empresario rosarino y uno de los pilares de Cruci, describe la diversidad y el alcance de su empresa, cuyo principal fuerte radica en la fabricación de juegos que se instalan en plazas, hoteles, terrazas de edificios, colegios, clubes y complejos acuáticos, entre otros lugares. Sin embargo, la visión de Cruci va mucho más allá de lo local, y con su reciente rebranding—dejando atrás el histórico nombre Crucijuegos tras 30 años—la empresa apuesta fuerte a su expansión internacional.
Un reciente hito en su trayectoria fue la visita de Carolina Ardohain, más conocida como Pampita, quien recorrió la planta de Cruci en Rosario junto a Ignacio y su hermano Germán. La presencia de Pampita no fue casual: su interés por colaborar con la empresa surgió a partir de una donación de una plaza al Hogar Santa Marta en Pilar durante la pandemia, un proyecto que la modelo impulsó tras haber conocido los productos de Cruci por su durabilidad y calidad. Hoy, la relación con Pampita podría abrir un nuevo capítulo en la historia de Cruci, con la posibilidad de desarrollar una cápsula de juegos para casas particulares bajo su marca. Aunque aún no se ha firmado un contrato, Ignacio Imaz se muestra optimista ante esta nueva oportunidad: “Está latente poder hacerlo”, afirma.
Pampita y su modelo de negocios
El interés de Pampita por vincularse con Cruci no es casual. La modelo ya ha demostrado su habilidad para asociarse con empresas en diversas industrias, como es el caso de la marca de anteojos Infinit o su línea de suplementos nutricionales Woman. Asimismo, es embajadora de diferentes marcas que promociona en sus redes sociales, lo que le otorga un alcance considerable en el mundo de los negocios. La colaboración con Cruci, según explica Ignacio, podría tener un impacto inmediato, tal como ocurrió con la donación de la plaza al Hogar Santa Marta, que provocó que la cuenta de Instagram de la empresa sumara 15 mil seguidores en un solo día.
Cruci: una empresa con visión a largo plazo
Pero Cruci no es solo una empresa que crece con el apoyo de figuras públicas. Su expansión internacional es uno de sus principales objetivos, y con ello vienen grandes desafíos. Actualmente, el 15% de su producción se comercializa en mercados como Uruguay, Bolivia, Paraguay y Chile, pero la meta a corto plazo es alcanzar el 30%. Además, la empresa ya ha incursionado en mercados más grandes como México, Colombia y Panamá.
Ignacio Imaz destaca que el plan de Cruci a 2030 es convertirse en el líder indiscutido de Latinoamérica en su rubro. Para lograrlo, están en proceso de certificar todas las normas necesarias para ingresar sin barreras a mercados como Europa y Estados Unidos. “Somos una industria 4.0, certificada en ISO 9001 hace ya siete años”, subraya Ignacio, quien agrega que también están en vías de certificar las normas UNE europeas y, posteriormente, las SPM americanas. Con este nivel de compromiso, Cruci no solo planea exportar productos, sino también know how.
Un centro de innovación y tecnología en Rosario
Uno de los proyectos más innovadores que Cruci tiene en marcha es la construcción de un edificio en su planta de 17.000 m², ubicado cerca de la autopista a Córdoba, que incluirá un coworking de 400 m² dedicado a la investigación y desarrollo. Equipado con impresoras 3D de última tecnología, este espacio permitirá acelerar el proceso de diseño y creación de nuevos productos. Inicialmente, utilizarán estas impresoras para fabricar miniaturas de los juegos antes de producirlos a tamaño real, pero el objetivo final es poder imprimir grandes estructuras en 3D, lo que, aunque no es más económico, sí optimiza los tiempos de producción.
Este espacio también será un punto de referencia para clientes de distintas partes del mundo que busquen un diseño y desarrollo de ingeniería de alta calidad, aunque prefieran fabricar los productos en otros países, como China. Cruci apunta a ser un centro de innovación que ofrezca soluciones a medida para mercados globales, siempre con el sello “Made in Argentina”.
Compromiso con la sostenibilidad
Uno de los aspectos más interesantes del futuro de Cruci es su apuesta por la sostenibilidad. En la planta ya se está probando un juego desarrollado con plástico reciclado, un primer paso hacia un futuro más ecológico. Ignacio reconoce que este tipo de producción aún es costosa en Argentina debido al alto precio de la energía, pero confía en que, a medida que los procesos se optimicen, los costos puedan reducirse. “En el primer mundo a las personas que reciclan no les cobran impuestos o los subsidian, pero acá no. Yo creo que en algún momento eso se equilibrará”, reflexiona.
El mercado privado como motor de crecimiento
Aunque tradicionalmente se asocia a Cruci con la venta de juegos para plazas públicas, cada vez más su negocio está orientado al sector privado. Hoy en día, el 45% de sus ventas se dirigen al ámbito público, mientras que el sector privado crece constantemente, impulsado por cadenas de retail que les solicitan juegos para vender en grandes superficies. Sin embargo, Cruci ha decidido priorizar otros proyectos antes de expandirse en esa dirección.
Un futuro con grandes desafíos
Con la mira puesta en su plan de expansión, Cruci no detiene su crecimiento. En el mismo predio de su actual planta, están construyendo una nueva fábrica de 7.000 m² que albergará el área de rotomoldeo, un laboratorio de calidad y un almacén para insumos. Este nuevo espacio permitirá a Cruci seguir aumentando su capacidad de producción y mantener su ritmo de innovación, todo mientras consolida su presencia en mercados internacionales.
Con una estrategia clara y un enfoque en la calidad, la innovación y la sostenibilidad, Cruci sigue posicionándose como una de las empresas más prometedoras del sector. Y aunque el futuro trae grandes desafíos, Ignacio Imaz confía en que la tercera generación de su familia estará lista para tomar la posta cuando llegue el momento.
