El Planetario de Rosario celebra 40 años: un viaje desde el sueño de Capolongo hasta la tecnología fulldome
El Planetario Municipal de Rosario, un emblema cultural y científico de la ciudad, celebra este fin de semana sus 40 años de historia con importantes mejoras tecnológicas y un homenaje especial al icónico músico Gustavo Cerati. Lo que comenzó como un proyecto impulsado por la pasión de Victorio Capolongo, un astrónomo aficionado y docente, ha evolucionado hasta convertirse en un referente de la divulgación astronómica en Argentina.
Capolongo, nacido en Mendoza en un hogar de inmigrantes italianos, encontró en Rosario el espacio ideal para desplegar su amor por las estrellas. En la década de 1940 fundó la Asociación Filosófica y Astronómica Cosmos en su casa de Sarmiento y Rioja, junto a un grupo de alumnos, con la ambición de construir un planetario en la ciudad. Sin embargo, el camino hacia la concreción de ese sueño no fue fácil. Los equipos adquiridos para el planetario pasaron décadas abandonados, lo que retrasó la apertura del recinto.
Finalmente, en junio de 1984, como parte de los festejos por el Día de la Bandera, el Planetario Municipal de Rosario abrió sus puertas, aunque Capolongo no llegó a ver este logro, ya que falleció en 1978. En su honor, el observatorio del Complejo Astronómico Municipal lleva su nombre.
Renovación tecnológica: el futuro del planetario
En este 40º aniversario, el planetario no solo celebra su historia, sino que también avanza hacia el futuro con la incorporación de tecnología de última generación. El espacio ha sido equipado con un sistema fulldome, que permitirá ofrecer experiencias inmersivas al público. Este sistema convierte al planetario en la sala inmersiva más grande del país, según destacó el secretario de Cultura del municipio, Federico Valentini.
Valentini explicó que la inversión forma parte de una estrategia para abrir aún más las instituciones culturales de la ciudad y ofrecer mejores condiciones a los rosarinos. Además, adelantó que este es solo el comienzo de las obras de transformación que se llevarán a cabo en el Complejo Astronómico Municipal, que incluirán la reinauguración del Museo Experimental de Ciencias el próximo año y la creación de un parque cultural en torno al edificio.
«Canciones por el Universo»: homenaje a Gustavo Cerati
Para conmemorar este importante aniversario, el Planetario de Rosario ofrecerá un espectáculo inaugural con su nueva tecnología: «Canciones por el Universo», un homenaje a Gustavo Cerati. Esta producción audiovisual, realizada por la productora local Pez Cine, combina proyecciones analógicas y digitales con videos en pantalla completa, celebrando la obra poética y musical del líder de Soda Stereo.
El espectáculo podrá verse el sábado 21 y domingo 22 de septiembre, con funciones cada hora. Además, el sábado habrá bandas tributo a Cerati y Soda Stereo para acompañar las actividades, en una jornada que promete ser un evento único para los fanáticos de la música y la astronomía.
Las entradas para el espectáculo son gratuitas y se podrán retirar en la boletería del planetario desde las 9 de la mañana, tanto el sábado como el domingo.
El camino hacia la creación del planetario
La historia del Planetario de Rosario es similar a la de muchas instituciones culturales de la ciudad: surgió de la iniciativa de ciudadanos apasionados que encontraron apoyo en los gobiernos locales para concretar sus proyectos. En este caso, la idea de construir un espacio para la divulgación astronómica comenzó en la Asociación Cosmos y fue respaldada por la Comisión de Amigos del Planetario y Observatorio Astronómico Municipal.
En 1962, durante la intendencia de Luis Cándido Carballo, se compraron un proyector y un telescopio para el observatorio, y se llamó a licitación para la construcción de los edificios, diseñados con la forma de un cometa de gran cabeza. El observatorio se inauguró ocho años después, en 1970, pero la apertura del planetario tuvo que esperar hasta 1984.
La demora se debió, en parte, a los vaivenes políticos de la época. Los equipos del planetario, adquiridos a la empresa alemana Carl Zeiss, llegaron al país en 1962, justo en el año en que el golpe militar derrocó al presidente Arturo Frondizi. Los equipos pasaron años almacenados en el puerto de Buenos Aires y luego en oficinas municipales de Rosario, hasta que finalmente, tras la última dictadura militar, el proyecto se concretó.
Un legado cultural y científico
El Planetario Municipal de Rosario es mucho más que un edificio: representa el esfuerzo colectivo de una ciudad por promover la cultura y la ciencia. Como lo pronosticó Capolongo en 1971, el planetario y el observatorio juntos formarían un «complejo científico cultural de enormes posibilidades para la investigación, la cultura y el turismo» en Rosario y su zona de influencia.
Hoy, 40 años después de su inauguración, ese legado sigue vigente. La renovación tecnológica y los proyectos futuros garantizan que el planetario continúe siendo un espacio de aprendizaje y descubrimiento para las próximas generaciones. Y aunque Capolongo no pudo ver su sueño hecho realidad, su visión sigue iluminando el camino de la ciencia en Rosario.
