Falleció Selva Alemán a los 80 años: una leyenda del teatro, cine y televisión argentina
La actriz Selva Alemán, uno de los grandes nombres del teatro, cine y televisión argentina, falleció a los 80 años, dejando un legado artístico inigualable. La noticia fue confirmada por el Multiteatro Comafi, que expresó su dolor en redes sociales al despedir a la esposa de Arturo Puig, con quien compartió una vida juntos durante cincuenta años.
Selva Carmen Giorno, nombre real de la actriz, comenzó su carrera a finales de la década de 1950, marcando el inicio de una trayectoria que se extendería por más de seis décadas. Alemán debutó en televisión en 1958 y, desde entonces, se convirtió en una figura icónica de la pantalla local, participando en series y telenovelas que se han quedado en la memoria colectiva del público argentino.
Una vida dedicada a la actuación
Selva Alemán destacó en una gran variedad de géneros televisivos. Formó parte de títulos emblemáticos como Alta comedia, Compromiso, Situación límite, Atreverse y Tiempo final, en los que demostró su versatilidad y capacidad para interpretar personajes complejos y emotivos. Su talento no pasó desapercibido en la industria, y fue reconocida con tres premios Martín Fierro por sus trabajos en Fiscales, Tiempo final y Malparida. Además, recibió el Konex de Platino 2011 como actriz de televisión de la década y el prestigioso ACE de Oro como actriz protagonista por la obra Madres e hijos.
En el cine, su primera aparición fue en la película El bruto (1962), abriendo paso a una serie de participaciones en más de veinte películas a lo largo de su carrera. Cada uno de sus trabajos cinematográficos fue una muestra más de su enorme talento y compromiso con el arte de la actuación.
Una vida personal junto a Arturo Puig
Desde 1974, Selva Alemán compartió su vida con el actor Arturo Puig, con quien contrajo matrimonio en 2001. Juntos, formaron una de las parejas más queridas y respetadas del ambiente artístico argentino. A lo largo de los años, Alemán y Puig se apoyaron mutuamente en sus carreras, convirtiéndose en un ejemplo de amor y compañerismo dentro y fuera del escenario.
Un nombre con historia
Selva adoptó su nombre artístico en honor al guitarrista de jazz Oscar Alemán, quien fue pareja de su madre durante los primeros años de su carrera como actriz. Para ella, Oscar Alemán fue una figura paterna, ya que nunca conoció a su padre biológico. «Él fue mi verdadero papá», confesó en alguna ocasión, recordando el cariño y la influencia que el músico tuvo en su vida.
Un legado que perdurará
Con la partida de Selva Alemán, la escena artística argentina pierde a una de sus figuras más destacadas, pero su legado perdurará en cada una de sus interpretaciones. Su dedicación, talento y pasión por la actuación dejaron una huella imborrable en la historia del entretenimiento en Argentina, y su nombre será recordado con admiración y respeto por las generaciones venideras.