Tormentas Aisladas y Viento Polar Golpean Rosario: Se Espera una Semana de Clima Inestable
Rosario y su región se preparan para una semana marcada por el regreso del frío polar y la inestabilidad climática. Según los pronósticos, el martes y miércoles estarán caracterizados por tormentas aisladas y ráfagas moderadas provenientes del este-sudeste, las cuales se intensificarán en las próximas 48 horas debido a la sudestada que afectará a Buenos Aires. Estas condiciones traerán nuevamente el frío polar a la región, sorprendiendo a los rosarinos con un cambio abrupto en el clima.
Un Clima Inestable y el Regreso del Frío
El clima húmedo y fresco que ha persistido desde el fin de semana se verá agravado por la entrada de aire frío desde el sur, combinada con la influencia de la sudestada. Vanessa Balchunas, meteoróloga, advirtió en una entrevista con La Capital que «esta semana el clima nos vuelve a sorprender y es por eso que agosto termina con frío». La especialista explicó que la formación de una baja presión, o ciclogénesis, está favoreciendo la entrada de aire frío desde el este, lo que desencadenará lluvias y tormentas en la región.
Desde el martes, se esperan lluvias aisladas en forma de lloviznas ligeras, que se irán intensificando hacia la madrugada del miércoles. Según Balchunas, «pueden haber algunas tormentas, pero lo más concentrado estará en el centro y norte provincial». Además, estas precipitaciones estarán acompañadas de ráfagas de viento que podrían prolongarse hasta el jueves, complicando aún más las condiciones climáticas.
Sudestada y Viento Intenso: Un Fenómeno para Tener en Cuenta
La sudestada es un fenómeno caracterizado por vientos fuertes provenientes del sudeste, que suelen afectar las zonas costeras del Río de la Plata y Buenos Aires. Aunque en Rosario no se espera que los vientos sean tan intensos como en la costa, Jorge Giometti, del Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático (CMMC-SAT), advirtió que «cuando hay desequilibrios, la velocidad del viento comienza a ascender y genera ráfagas muy fuertes, que en la zona pueden superar los 50 kilómetros por hora». Esto implica que la ciudad podría experimentar rachas de viento significativas, capaces de causar daños y complicar la movilidad urbana.
El Servicio Meteorológico Nacional también pronosticó vientos de entre 23 y 30 kilómetros por hora para el martes, con rachas que podrían alcanzar los 50 kilómetros por hora. Estas condiciones se mantendrán durante el jueves y sábado, lo que significa que Rosario estará bajo el impacto de la sudestada durante varios días.
Frío Polar y Heladas: Un Fin de Semana Glacial
El descenso de las temperaturas será notable a lo largo de la semana. Balchunas advirtió que «volvemos al frío polar con mínimas menores a 3 grados, incluso algunos días con sensación térmica inferior a eso, y máximas que no superarán los 13 y 14 grados». Este retorno del frío polar será especialmente intenso durante el fin de semana, cuando se esperan heladas en las áreas suburbanas y rurales.
El pronóstico para el fin de semana anticipa mañanas muy frías, con mínimas que podrían descender por debajo de los 3 grados, y máximas que apenas alcanzarán los 13 grados. Aunque se espera que el sol haga su aparición durante el fin de semana, el frío será el protagonista, manteniendo a los rosarinos bajo temperaturas invernales hasta al menos el martes de la próxima semana.
Recomendaciones y Precauciones
Dado el pronóstico de vientos fuertes y lluvias, se recomienda a los habitantes de Rosario y la región tomar precauciones adicionales. El uso de paraguas podría ser complicado debido a las ráfagas de viento, y se aconseja llevar un buen pilotín para mantenerse seco. Además, es importante estar atentos a las condiciones del tránsito y evitar zonas con árboles o estructuras inestables que podrían verse afectadas por el viento.
En conclusión, Rosario se enfrenta a una semana de clima adverso, con la combinación de frío polar, lluvias y vientos intensos. Las condiciones meteorológicas obligan a estar preparados y tomar las medidas necesarias para enfrentar este nuevo embate del invierno, que parece resistirse a dar paso a la primavera.