Martin Fierro a la radio, Marina Calabro la protagonista
La historia de amor de los periodistas Marina Calabró y Rolando Barbano vivió un nuevo e incómodo momento la noche del domingo en los Premios Martín Fierro de la Radio, donde ambos resultaron ganadores en sus ternas. Cuando subió al escenario dedicó su premio a Barbano, pero al subir ni siquiera lo mencionó.
Compañeros del programa «Lanata sinfiltro», donde él hace una columna de entretenimiento y ella una columna policial, supieron vivir un intenso romance que terminó de manera opaca. Pero anoche, quiso el destino, volver a estar en la misma mesa, compitiendo cada uno con su lista de favoritos.
Dedicatoria de Marina Calabró
La hija de Juan Carlos Calabró fue la primera en subir al escenario cuando Florencia de la V pronunció su nombre como ganadora del Martín Fierro. «La verdad, te lo juro, estaba convencido de que iba a perder», comenzó. Luego de mencionar a sus actuales concursantes (Marcela Tauro, Pía Shaw y Tamara Pettinato) y a su familia, agradeció a sus compañeros de programa. Hasta que le llegó el turno de mencionar a Barbano, con quien estuvo en pareja hasta hace semanas, y dijo: “Esto quiero compartirlo y dedicárselo a mi amor. Sí, a ti Rolando. A ti. Gracias a todos». Mientras la cámara captaba la risa nerviosa del reportero, el presentador Fer Dente exclamó: «Wow, lo picaron». «Nos preguntábamos si se lo iba a decir o no», agregó Karina Mazzoco. «Para ustedes, » añadió Dente, mientras Barbano sacudía la cabeza y bebía agua
Un momento Barbano
Pero unos minutos más tarde, Rolando Barbano subió al escenario para aceptar la escultura por su trabajo como reportero policial. Junto a su hijo Rocco agradeció a Aptra el premio y se lo dedicó a Lanata. Pero mientras las cámaras enfocaban a Marina Calabro, continuó: «Se lo dedico a mi hijo Rocco, a mi hija Nina que está en casa, a mi viejo querido que seguramente cuidará de mí. Mi madre, mi hermana, mis amigos y el personas de 271. Gracias Aptra.»
La imagen en pantalla de Calabro aplaudiendo nerviosamente hizo aún más evidente la gran omisión de Barbano en su discurso. Mientras tanto, el salón se llenó de gemidos por la actitud del ganador, y el desagradable momento corrió como un virus en las redes..