Aumento de mosquitos en Rosario desata escasez de repelentes de primera línea, generando preocupación en la población
Las recientes lluvias en la ciudad de Rosario han propiciado un significativo incremento en la población de mosquitos, generando molestias y preocupación entre los residentes. A medida que estos insectos, conocidos transmisores de enfermedades como el dengue, chikungunya y zika, se hacen más presentes en las primeras horas de la mañana y al caer la tarde, los ciudadanos se encuentran enfrentando dificultades para adquirir repelentes, especialmente aquellos de marcas reconocidas.
El prosecretario del Colegio de Farmacéuticos de Rosario, Leonardo Jurado, informó que la demanda de repelentes ha experimentado un aumento notable desde la semana pasada. No obstante, la escasez se ha hecho evidente, especialmente en las góndolas de supermercados y farmacias, donde las marcas líderes brillan por su ausencia, incluso en presentaciones de tabletas fabricadas en el extranjero.
Según Jurado, la dificultad radica en la falta de tapitas para los envases de las marcas alternativas, afectando la cadena de suministro. Aunque se espera la llegada de algunas unidades en los próximos días, se anticipa que la escasez persistirá durante la semana. En cuanto a las marcas reconocidas, Jurado especula sobre posibles motivos, mencionando un posible componente especulativo, a pesar de los límites de aumento establecidos por el gobierno.
El costo elevado de los repelentes de marcas estándar, fluctuando entre $800 y $1000 por envase de 130 mililitros, no ha disuadido a la población, que busca protegerse ante la notable invasión de mosquitos en la ciudad. Además, los espirales, otro método comúnmente utilizado, también son difíciles de conseguir, lo que lleva a la búsqueda de alternativas en ferreterías locales.
Ante la demora en la llegada de repelentes de primera línea, Jurado enfatiza la importancia de utilizar cualquier repelente disponible, independientemente de la marca, y sugiere medidas como el uso de ropa fresca pero de manga larga desde las primeras horas de la mañana para prevenir las picaduras de mosquitos.